Ginecomastia o cirugía reductiva de pecho en varón: Una fuente de complejos con fácil solución.

Ginecomastia o cirugía reductiva de pecho en varón: Una fuente de complejos con fácil solución.

Cuando hablamos de ginecomastia, hablamos de una deformidad común en el pecho del hombre, básicamente la ginecomastia es un aumento benigno del tamaño de la mama en el varón, de origen multifactorial. En la mayoría de casos es de origen idiopático (no se conoce la causa concreta), y en otras muchas ocasiones parece que el desequilibrio entre estradiol y testosterona es la causa subyacente. En ocasiones se precisa una corrección quirúrgica para devolver al torso su masculinidad.

En primer lugar, al abordar una ginecomastia, el profesional sanitario ha de realizar un adecuado diagnóstico de su origen, y determinar si su desarrollo ha sido causado por un desequilibrio fisiológico,  o si por el contrario detrás de esta anomalía se esconde una patología o enfermedad que requiera tratamiento (un tumor, alteraciones hormonales patológicas, uso de fármacos, etc.).

La prevalencia de ginecomastia en varones adolescentes es bastante elevada, hay estudios que la situan en 38-64% de los varones adolescentes, aunque en la mayoría de estos casos, la ginecomastia acaba desapareciendo con el desarrollo, al final de la adolescencia. Por ello en niños y jóvenes, conviene esperar a que concluya su desarrollo en la mayoría de casos antes de indicar una cirugía correctiva.

La ginecomastia puede tener como origen un exceso de tejido adiposo o concentrarse en un desarrollo exagerado de la glándula mamaria. La «pseudoginecomastia» es la alteración en la que  el desarrollo mamario excesivo es exclusivamente a expensas de tejido adiposo o graso,  casos que se relacionan estrechamente con el exceso de peso.

Es frecuente que la ginecomastia en los casos en que no se resuelve espontáneamente con el desarrollo y crecimiento, o tampoco con tratamientos médicos, suponga un gran complejo y se viva como una auténtica deformidad, lo cual tiene como consecuencia una pérdida de autoestima y autoimagen con una afectación psicosocial importante.

 

Los factores más importantes a tener en cuenta al tratar una ginecomastia son:

 

  1. El tamaño de la mama
  2. El exceso de piel
  3. La ptosis mamaria (el grado en el cual la mama se encuentra caída o descolgada)
  4. Composición (glándula y/o tejido adiposo)
  5. Deformidad: la más típica la tuberosidad
  6. Malposición del pezón
  7. Forma de tórax

 

En cuanto a la corrección quirúrgica de la ginecomastia, básicamente hay 3 procedimientos básicos que se van combinando según las exigencias y características individuales de cada paciente:

 

  1. Excisión de tejido mamario.
  2. Liposucción de tejido adiposo mamario.
  3. Resección cutánea. Puede ser circunareolar pura (alrededor de la areola), circunareolar con extensiones transversas, o en huso a nivel del surco.
  4. Combinación de las anteriores.
  5. En ocasiones es necesario injertar la areola, si el exceso de tejido es severo y esta se encuentra muy ptósica o descolgada.

 

 

Ginecomastia en culturistas.

En este tipo de pacientes el impacto psicológico es aún mayor puesto que están sometidos a grandes exigencias, impuestas tanto por ellos mismos, como por las competiciones en las que participan.

En este grupo poblacional la ginecomastia o aumento de glándula mamaria, se debe casi exclusivamente a un aumento de desarrollo glandular (ya que presentan porcentajes casi inexistentes de grasa corporal).

 

En estos pacientes la aparición de ginecomastia se debe generalmente al uso de esteroides anabólicos o ingestión de compuestos hormonales que se venden en tiendas de nutrición deportiva. Pese a detener el uso de estos fármacos, la ginecomastia como deformidad suele permanecer.

La corrección quirúrgica en estos casos es más demandante que en otros pacientes. Esto se debe a las siguientes razones:

  1. La ginecomastia suele ser puramente glandular, sin exceso de tejido adiposo, por lo que requiere una excisión muy precisa para no dejar secuelas, hundimientos o irregularidades.
  2. Los tejidos suelen estar muy vascularizados por el sobreentrenamiento y la influencia hormonal.
  3. Se ha de resecar toda la glándula para evitar que vuelva a recidivar (si se dejan restos, en muchas ocasiones podría volver a aparecer).
  4. Estos pacientes son exigentes y perfeccionistas, y no se van a conformar con un resultado mediocre o pobre.

¿Qué cosas hay que tener en cuenta de cara a la realización de esta cirugía?

 

  1. Fumar es una contraindicación relativa. El tabaco tiene efectos negativos sobre la cicatrización.
  2. Se ha de realizar en un quirófano con las condiciones de seguridad necesarias.
  3. El tipo de anestesia variará en función de la intervención: desde una sedación profunda en el caso de que sólo se precise una liposucción, hasta anestesia general en el caso de que la intervención requiera más procedimientos.
  4. La duración de la intervención es de 60-120 minutos.
  5. El ingreso suele ser de 12 a 24 horas.
  6. Generalmente no se utilizan drenajes, a excepción de casos en los cuales la resección cutánea o glandular sea demasiado extensa.
  7. Después de la operación se han de llevar prendas de compresión durante 4-6 semanas.
  8. El periodo de recuperación es de 1-2 semanas para recuperar las actividades de la vida normal, y de 4-6 semanas para reiniciar la práctica deportiva.
  9. Las complicaciones son poco frecuentes, aunque en ocasiones se podría producir la aparición de un hematoma, seroma, una infección, necrosis cutánea o de la areola, mala cicatrización, alteraciones de contorno, piel redundante, asimetrías, etc. Por ello es tan importante elegir un buen cirujano con experiencia en esta patología.

 

Si usted se está planteando someterse a esta intervención, puede solicitar una visita en nuestra consulta para conocer su caso concreto, analizar sus características individuales y darle un asesoramiento personalizado. Estaremos encantados de atenderle.

Dra. María Eloísa Villaverde Doménech.   Especialista en Cirugía plástica, estética y Reconstructiva.

Me puedes encontrar en: Hospital 9 d´Octubre, Valencia.    Contacto: 684148979;    info@dravillaverde.com