La lobuloplastia, una solución para corregir el lóbulo de la oreja.

el lobulo de la oreja

La lobuloplastia, una solución para corregir el lóbulo de la oreja.

El lóbulo de la oreja es esa pequeña parte colgante, redondeada y carnosa que tenemos en la parte inferior de la oreja. Un pequeño apéndice colgante donde solemos ponernos pendientes y dilataciones a lo largo de nuestra vida. Aunque no lo creas es una parte del cuerpo con cierta importancia estética, ya que su estado se relaciona con la edad de la persona. Pasa lo mismo con otras zonas del cuerpo como las manos o el cuello.

Con el paso del tiempo el lóbulo de la oreja va perdiendo volumen, tersura y firmeza. Es entonces cuando empieza a verse más delgado, alargado o incluso con arrugas. En otras ocasiones, al haber llevado grandes y preciosos pendientes pueden rasgarse un poco haciendo que el lóbulo caiga flácido y sin tersura.

cirgugia en lobulos rasgados

Para corregir el lóbulo de la oreja tienes que someterte a una lobuloplastia.

La lobuloplastia es una cirugía muy sencilla que reestructura el lóbulo de la oreja devolviéndole su aspecto joven. Este procedimiento puede realizarse a través de diversas técnicas de reducción o incluso volviendo a darle su forma redondeada y carnosa.

Hasta hace unos años esta cirugía era propia de mujeres. Ellas siempre han lucido pendientes de todo tipo, bajo la atenta mirada de la moda y las tendencias. Unas veces se llevaban aros enormes, otras, en cambio, preciosos pendientes colgantes. La moda siempre ha acompañado a la mujer y este hecho ha provocado que ellas hayan sido las primeras en someterse a una lobuloplastia. Hoy en día prácticamente podemos decir que la tendencia está cambiando. Cada vez son más los hombres que se someten a una lobuloplastia para corregir el lóbulo de la oreja. Y los motivos son los mismos que los de las mujeres, devolverle a la oreja un aspecto más joven.

¿En qué casos se puede realizar una lobuloplastia?

Si simplemente se pretende devolver el aspecto redondeado, armónico y carnoso al lóbulo. También puede ser que el lóbulo de la oreja se haya rasgado mucho y se haya separado en dos, dando lugar al «lóbulo bífido». Esta situación es muy incómoda ya que muchas veces los pendientes se caen o quedan desiguales. En ambos casos la intervención dura más o menos lo mismo (30-50 minutos) y la anestesia es local.

También puede suceder que se pretenda recuperar el estado inicial del lóbulo de la oreja tras una dilatación. En este caso también podemos conseguirlo con la lobuloplastia.

Si quieres saber más sobre cómo puedes corregir el lóbulo de la oreja ponte en contacto conmigo. La primera consulta es gratuita.