¿Qué es la otoplastia?
La otoplastia es la cirugía que corrige la forma anómala de las orejas. La deformidad más común son las orejas en soplillo o en asa, y se debe a la falta o a la mala definición de los pliegues naturales del cartílago de la oreja o a la proyección aumentada de alguno de estos pliegues, dando un aspecto poco estético tanto en mujeres como en hombres.
Otras veces las orejas presentan un grado de malformación más complejo, con pliegues extras anómalos, se ven muy cerradas o constreñidas, o son asimétricas (una excesivamente grande o pequeña).
La otoplastia recrea una forma más natural, pasando las orejas a ser inadvertidas, al tiempo que aporta equilibrio y proporción a la cara y rostro. La corrección de incluso deformidades menores puede tener profundos beneficios para la apariencia y la autoestima.
El objetivo de una operación de cirugía estética de orejas u otoplastia no es alcanzar unas medidas exactas, sino encontrar formas y proporciones finales adecuadas que den un aspecto de naturalidad y normalidad al paciente. En ocasiones es necesario para este fin utilizar diferentes herramientas o procedimientos. Cada caso es diferente y se deberá planificar de manera individualizada y aplicando las diferentes herramientas de las que disponemos para obtener un resultado excelente.
Candidatos para el tratamiento
La otoplastia es una técnica quirúrgica que permite mejorar el aspecto de las orejas de manera permanente en personas con orejas prominentes u otras deformidades. Son candidatos tanto niños como adolescentes o adultos, siempre con buenos resultados.
Generalmente en niños, se recomienda a partir de los 3 años cuando el cartílago ha madurado y antes de la escolarización. Las orejas en asa pueden causarles complejo y un trastorno de relación serio (sobre todo situaciones de bullying o acoso escolar) que resulte un problema mayor que la cirugía en sí, que no es nada traumática para los pacientes. En otras ocasiones se recomienda esperar hasta los 5-6 años, cuando los pequeños ya tienen concepción de las características de su propio cuerpo, y sea él mismo quien lo pida, porque no le guste la apariencia de sus orejas.
Los pacientes adultos que se someten a esta intervención suelen ser personas que nos refieren haber estado toda su vida acomplejados y ocultando sus orejas de las más variadas maneras (pelo largo, turbantes, gorros, etc).
¿Qué puede tratar la otoplastia?
La mayor parte de los casos de otoplastia son sencillos y consisten en dar forma al pliegue de la oreja (antehélix) y aproximar los pabellones auriculares a la zona mastoidea para que queden en una posición natural.
• Orejas demasiado grandes: una condición llamada macrotia.
• Orejas sobresalientes que ocurren en uno o ambos lados en diversos grados, no asociadas con pérdida auditiva; las llamadas orejas “en asa” o “de soplillo”.
• Orejas con pliegues extras anómalos, se ven muy cerradas o constreñidas o son asimétricas (excesivamente grandes o pequeñas). Otras deformidades congénitas.
• Insatisfacción de adultos con cirugías previas.
Procedimiento de otoplastia
• Anestesia. Las opciones posibles incluyen sedación +. anestesia local, o bien anestesia general. Se decidirá en función de las características de cada paciente.
• Procedimiento. Las incisiones para otoplastia generalmente se hacen en la superficie posterior del pabellón auricular, en el llamado pliegue retroauricular. De esta manera, la incisión es prácticamente invisible (se esconde dentro del pliegue). Cuando son necesarias incisiones en la parte frontal de la oreja, se aprovechan también pliegues para ocultarlas.
• Cicatriz. La cicatriz se localiza en el pliegue retroauricular, totalmente camuflada. Se tiene cuidado de no distorsionar otras estructuras y evitar una apariencia antinatural «inmovilizada».
• Resultados. La cirugía de orejas ofrece resultados inmediatos en casos de orejas prominentes, visibles una vez que se quitan los apósitos durante las fases iniciales de curación. No obstante, las primeras 2-3 semanas los pabellones auriculares se mostrarán algo inflamados y edematosos (con acumulación de líquidos). Los puntos se retiran en 1 semana y es recomendable llevar una prenda de presoterapia (tipo turbante) 2 semanas, para favorecer la cicatrización en la posición adecuada, así como que se reabsorba antes la inflamación.
• ¿Cuáles son los riesgos de la otoplastia?
Los posibles riesgos de la cirugía de oído incluyen:
• Sangrado (hematoma).
• Asimetría.
• Infección de herida quirúrgica.
• Mala cicatrización de heridas.
• Cambio en la sensación de la piel (pérdida de sensibilidad…).
• Dolor.
No obstante la frecuencia de estas complicaciones es menor al 2%, y siempre tiene un tratamiento que lo pude solventar (drenar un hematoma, retocar la cirugía para conseguir una simetría total, mejorar cicatrices, tratar con antibiótico…)
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