La reconstrucción de pecho tras una mastectomía, el caso de Isabel

29 Ene La reconstrucción de pecho tras una mastectomía, el caso de Isabel

Hay historias que tienen finales felices. La historia de Isabel y su proceso de reconstrucción de pecho tras una mastectomía es una de ellas.

Isabel tuvo que someterse a una mastectomía por un cáncer de pecho. Desde entonces su único objetivo siempre ha sido someterse a un proceso de reconstrucción de mama que le devolviera a su cuerpo dos pechos. Además, Isabel ha sido una de las primeras en pedir cita para el tatuaje de areola-pezón tras una reconstrucción mamaria que vamos a realizar en los meses de Febrero y Marzo.

¿Cómo fue el proceso de reconstrucción de pecho de Isabel?

Existen diferentes técnicas de reconstrucción de pecho que se pueden realizar tras una mastectomía. En la página de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) puedes informarte de todo lo relativo a este tema.

Isabel se realizó una mastectomía, por cirujanos generales, por cáncer de mama. En esta intervención le extirparon la mama afectada y se analizaron los ganglios linfáticos de la axila. Recibió múltiples sesiones de radioterapia para completar el tratamiento, lo cual disminuyó la incidencia de recidivas tumorales, pero dañó mucho los tejidos. Entre ellos la piel de la mastectomía. Después se puso en manos de la Doctora Villaverde para iniciar el proceso de reconstrucción de pecho.

Dado que tenía la piel del tórax y zona de mastectomía muy dañada, fue necesario aportar tejido sano de otro lugar para reconstruir la mama: un colgajo lattissimus dorsi con isla de piel e inclusión de expansor. Después, el expansor se va llenando en consulta semana tras semana hasta alcanzar un volumen adecuado, y una expansión de la piel suficiente. En la última intervención se cambió el expansor por una prótesis mamaria definitiva. Las mamas quedaron totalmente simétricas gracias a una pexia prótesis de la otra mama.

El caso de Isabel es hoy uno de nuestros logros como equipo en la clínica de la Doctora Villaverde. Estamos muy felices de haberle ayudado en todo este proceso de reconstrucción mamaria. Le hemos hecho una entrevista para que nos cuente cómo ha sido todo este viaje y esto es lo que nos ha contado.

¿Quién era Isabel antes de la reconstrucción de pecho?

Pues yo era una chica muy normal, la típica persona que pensaba que esto nunca le iba a pasar.

¿Cómo te ha cambiado la vida este proceso?

El proceso de reconstrucción de pecho ha merecido la pena totalmente. Nunca tuve ninguna duda, lo tuve claro desde el principio. Es más, era «muy pesada» con los médicos porque siempre preguntaba cuándo me operarían a mi.

Hoy soy una Isabel completamente diferente, estoy muy agradecida a la vida. Soy una persona nueva que ahora prioriza más las cosas importantes. En cierta manera doy gracias a Dios porque este proceso me ha enseñado mucho, sobre todo a darme cuenta de la guerrera que hay en mi. Cuando ahora me miro al espejo, me siento como si fuera una modelo y eso es gracias a la Doctora Villaverde.

¿Cómo fue verte por primera vez después de la mastectomía?

Fue muy difícil, pero quise verme al segundo día. Necesitaba mirarme y ver mi nuevo cuerpo. Siempre he sido una mujer a la que le ha gustado llevar bonitos escotes, así que os podéis imaginar el shock que estaba viviendo. Aún así, siempre pensé que todo esto iba a ser temporal. Empecé a mirar fotos de operaciones de aumento y reconstrucciones de pecho. Me imaginaba cómo sería el resultado de una reconstrucción de mama en mi cuerpo y al final he podido verlo, gracias a la Doctora Villaverde.

¿Te daba miedo someterte a una reconstrucción de pecho?

Sí. Tuve algo de miedo al principio porque sabía que el resultado final no tendría vuelta de hoja. Sabía que esa sería «mi nueva yo» para siempre. Pero cuando conocí a la Doctora Eloísa Villaverde mis miedos desaparecieron desde la primera consulta en su clínica.  Cuando me explicó cómo sería todo el proceso y empecé a ver el resultado en cada expansión pensé: la Doctora Villaverde es un ángel en mi vida.

¿Conocías el trabajo de Cirugía Plástica, Estética y Reconstructiva de la Doctora Villaverde?

No conocía a la Doctora Villaverde de nada. Yo vine de Asturias hace 2 años, así que no conocía nada de su trabajo.

La conocí en el Hospital de Castellón. Anteriormente me visitaba otro cirujano pero me cambiaron de médico por temas burocráticos, siendo finalmente la Doctora Villaverde quien se encargó de mi caso. Fue como un ángel en mi vida. El destino.

Vas a tatuarte en febrero el complejo areola – pezón en 3D en la clínica de la Doctora Villaverde, ¿qué expectativas tienes?

Sí, así es. Por medio de la Dra. Villaverde he conocido el trabajo de Elena Alonso Gaztelumendi, una tatuadora especialista en hiperrealismo, he visto fotos que me ayudaron a decidirme por este broche de oro final al proceso de reconstrucción mamaria. No me apetecía pasar por quirófano otra vez, así que pedí cita para febrero. Tengo muchas ganas de que llegue el día para hacérmelo. El pecho cambia muchísimo con pezón. Tengo la certeza de que quedará brutal, porque tengo mucha confianza en la Doctora Villaverde y su equipo.

¿Qué mensaje le darías a las mujeres que todavía no se han realizado una reconstrucción de pecho?

Les diría que luchen, que visualicen en todo momento el final de este proceso. Que hay luz al final del túnel, que sólo es una situación momentánea y que luego sale el sol de nuevo.

Somos princesas rosas, guerreras de luz y podemos con esto y con más. Es «una puñetita» el proceso del tratamiento, pero siempre que tengan en la mente que todo es temporal y que como empieza, también acaba.

¿Qué mensaje tienes para los hombres y otras personas de la familia o allegados de estas mujeres?

Les diría ¡que son muy importantes! Pero tienen que dejar espacio a las guerreras, que ellas sean quienes marquen los tiempos. Me refiero a que las dejen llorar cuando lo necesiten, hablar cuando les apetezca y que les den espacio de soledad si lo piden. Es un proceso en el que nosotras nos tenemos que volver a parir a nosotras mismas. Si ellas necesitan ayuda, la pedirán y ellos deberán estar allí. Simplemente eso.

Te dejamos un espacio para decir lo que te apetezca.

Solo quiero decir lo inmensamente agradecida que estoy a la Doctora Villaverde. Que ahora, gracias a ella, miro hacia atrás y pienso: pues no fue para tanto. ¡Este premio ha merecido la pena todo el proceso! Me llevo conmigo mi fortaleza, mis prioridades que ahora son distintas y obviamente haber tenido el enorme honor de pasar por las manos de la Doctora Villaverde.

Solo puedo decir GRACIAS GRACIAS GRACIAS